Siempre que te veo me río

Siempre que estamos juntos no puedo dejar de sentirme feliz, tal vez porque siempre que te veo por alguna extraña e inexplicable razón vuelvo a ser yo mismo, y ser yo mismo siempre me pone feliz. Ahora entre tantos “siempre” quiero añadir uno mas, siempre te agradeceré lo que me has enseñado. Lo que me has mostrado ha hecho mella en mi, aunque sea poco el tiempo que hemos compartido me quedo con mucho, mas de lo que te imaginas. Lamentablemente no puedo decir que lo he aprendido todo, que ya no te necesito y que no me ha hecho falta, o que no lo extraño, pero que mas da, me has ayudado a voltear la mirada hacia algo que ni siquiera tenia idea que permanecía conmigo. Ahora tengo que trabajar en ello, quizá nuestros caminos se separen, tal vez en unos meses, quizá en un año no sea mas que un recuerdo borroso. Pero quiero que sepas que cada sonrisa, cada éxito, cada momento feliz llevara un poco de lo que en mi has plantado.

Alguien tiene que hacerlo

Mi padre me dice que debo reconsiderar el dedicarme a ser profesor, me dice que es un trabajo muy pesado y no es bien remunerado, que las condiciones no son las adecuadas, que hay que buscar mejores opciones porque de lo contrario me espera una vida bastante precaria.

Pero que demonios, me gusta lo que hago, me parece que es importante, sé que no soy el mejor pero, para ser honestos me considero malo porque estoy seguro que tengo mucho por mejorar en ello, y lo haré, estoy convencido de ello. Quizá todo lo que me ha dicho es cierto, pero entonces si no lo hace alguien que le gusta ¿Quién lo hará?

Lo cierto es que la respuesta a esa pregunta me parece francamente preocupante, si alguien que siente vocación por ser profesor no se dedica a ello a final de cuentas ¿Qué tipo de personas se quedarán? Los que no tengan ninguna otra posibilidad, y en tales condiciones sin estar ahí por gusto la vida puede volverse tortuosa, no solo para el profesor sino para los alumnos.

Así que no pienso abdicar, aun soy joven y creo que el amor lo puede todo, en este caso el amor a tu trabajo, a tus estudiantes, de momento es lo que me llena y es lo que me hace sentir que puedo hacer algo útil con mi vida.

¿Lo recuerdas?

Eramos muy jóvenes para hablar de amor y sin embargo lo sentíamos, lastima que no pudimos llevar a buen termino todo aquello que teníamos dentro.

Y hoy, a cerca de 7 años del inicio de todo nos damos cuenta que hay cosas que siguen igual, te lo he dicho tantas veces, aunque en ocasiones yo mismo lo dudo, -ya sea para bien o para mal las personas rara vez cambian- y cuando comenzamos a hablar parece que no ha pasado ni un segundo desde que nos dejamos llevar por ese sentimiento que nos embargaba.

Pero poco dura el encanto y volvemos al instante en que nos encontramos, al que nos condujo el camino que cada quien decidió tomar, demasiado lejos como para que se crucen, muy cerca como para olvidar.

¿Para qué escribo?

Solo escribo para mi, sin ninguna pretensión distinta a recordar en un futuro, si es que lo he olvidado, todas esas cosas que en su momento fueron importantes en mi vida. Quizá nadie más lea estas lineas, pero ¿Qué mas da? si a mi me sirven en algún momento para recordar el sabor a gloria que tienen ciertas cosas simples y pequeñas.

Exitoso

Debes ser exitoso escucho todo el tiempo. Debes conocer el mundo, tener un buen trabajo, vivir holgadamente, tienes que ser mejor que todos, mejor que la mayoría, mejor que alguien por lo menos para ser exitoso. He de decir que yo realmente no quiero ser exitoso, no se si sea importante o no, pero no creo que sea algo que me haga feliz, ni infeliz, simplemente mis intereses son otros, por lo cual no pretendo desgastarme intentando seguir metas que la sociedad nos ha dicho que debemos de lograr para sentir que nuestra vida vale la pena. Solo quiero tener tiempo de pensar, de mirar al cielo y sentir que lo que hago puede ser útil para alguien. Groso modo creo que eso es algo que a mi en verdad me haría sentir feliz, aunque jamás pise Europa.